
Hechos como estos son la prueba irrefutable de la crisis social que padece el país en la actualidad, de la cual no escapa ningún ciudadano, sin distingo de su condición social. Ahora más que nunca urge la concertación y el diálogo para trabajar en un proyecto de país que garantice la vida y la integridad de los venezolanos honestos y trabajadores, que estamos seguros somos mayoría.
Ahora más que nunca, la empresa privada está comprometida con su misión de promover los valores democráticos, y exige a las autoridades esclarecer este hecho, en el que la violencia pone en zozobra una vez más a la familia venezolana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario